Esto no va a dolerte

¿Puedes darme la mano y venir un segundo?
Tengo una vida que mostrarte.

No tengas miedo, es como un cactus, salvo que tiene las espinas hacia adentro.

Ven, solo son dos pasos y ya llegamos. Uno por mi madre y otro por mi padre.

¿Que qué es aquello?

Tranquilo, es el armario de los monstruos, cada mañana me pongo uno diferente y le enseño Madrid.

Pero no tengas celos, a ellos sólo les enseño los neones apagados y los semáforos en verde.

¿Quieres ver más?

Me alegra oírlo, o escucharlo, bueno, no se, que gracias por venir y no tocar mi caos, está todo perfectamente desordenado y me gusta así.

Ya puedes soltarme la mano, aprietas mucho para no creer en Dios.

Este es mi rincón favorito, pero aquí no puedes entrar. Se llama soledad y se lo puse por una canción de Sabina, si, esa que habla de una musa incomprendida, ¿no te suena?
Creo que me empiezas a dar miedo.

Ahora si, dame la mano de nuevo y te enseño lo mejor.

¿Ves ese precipicio?

Es precioso y se llama futuro.

Pero a mi, me da miedo saltar.

A la de tres, para siempre.

Una

Dos

…..

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